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Punto 912
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Llamamiento · Punto 912
Me explico el sufrimiento tuyo cuando en medio
de tu forzosa inactividad consideras la tarea Fiat mihi (Hagase en mí, en castellano): es la traducción en latín de las palabras que pronunció la Virgen María al conocer, por medio del Arcángel Gabriel, que iba a ser la Madre del Redentor. Non mea voluntas sed tua fiat (No se haga mi voluntad sino la tuya): palabras que le dirige Nuestro Señor Jesucristo a Dios Padre cuando oraba en el Huerto de los Olivos, en el preludio de su Pasión, poco antes de que le prendieran para crucificarle. |
Comentario
Una carta de Juan Jiménez Vargas da origen, de alguna manera, a dos textos de este capítulo: a este punto 912 y al punto 928, que están concatenados entre sí. Este es el párrafo de la carta de Jiménez Vargas que está en el trasfondo de este punto 912:
Jiménez Vargas, que en su Relato alude al punto 928 en relación con esta carta [4], no dice nada respecto al punto 912. San Josemaría como se ve, da la vuelta a las expresiones de la carta y redacta el punto pensando en tantos que estaban en la misma situación. «El Fiat». Es, radicalmente, el «fiat mihi...» de Nuestra Señora en la Anunciación (Lc 1, 38) y el «non mea voluntas sed tua fiat» de Jesús en el Huerto (Lc 22, 42). Pero Jiménez Vargas –casi con toda seguridad– está nombrando la oración que San Josemaría transcribe en el punto 691 de Camino, que es emblemática dentro de sus enseñanzas. [1] Vid en en el comentario al punto 928 el párrafo precedente de la carta de Vargas. [2]. Con el nombre de Mariano, Jiménez Vargas alude a San Josemaría. Ese era su cuarto nombre de pila, y con él firmaba muchas de sus cartas personales. [3] Carta de Juan Jiménez Vargas a los de Burgos, Muela de Villastar 16-X-1938; AGP, sec N-2, leg 148, carp B, exp 1. [4] Relato del 77, pg 18. |