Menú
Capítulo
Punto 518
La Iglesia · Punto 518

¡Qué alegría, poder decir con todas las veras de mi alma:
amo a mi Madre
la Iglesia santa!

Comentario

Texto escrito por San Josemaría sobre una octavilla en blanco, con trazos fuertes y enérgicos. Consultar el comentario al punto 517. En Camino, y en los escritos de esta época, la Iglesia es, para San Josemaría, ante todo, Madre [1]. Por eso, el cristiano ama a la Iglesia.

En una meditación predicada en 1935 a alumnas de la Institución Teresiana, San Josemaría decía:

«Ecce Mater tua. ¡María Inmaculada, mi Madre! 3 madres: Ella, la Iglesia y la que me dio el ser. Si preguntáramos a un alma enamorada... Tres amores que son un amor purísimo» [2].

Resuena aquí, como en todo el cap, el sentido gozoso de la maternidad virginal de la Iglesia, tan característico de la teología de los Padres:

«A vosotros, a quienes estoy hablando, que sois miembros de Cristo, ¿quién os ha dado a luz? Oigo la voz de vuestro corazón: la Madre Iglesia. Esta Madre santa, honorable, semejante a María, da a luz y es virgen» [3].



[1] En Camino, San Josemaría contempla a la Iglesia, en su dimensión de fraternidad, sobre todo a través de la «communio sanctorum». Consultar el capítulo «Comunión de los santos».

[2] Ejercicios Espirituales, Plática «La Santísima Virgen», Madrid enero-1935; guión nº 20.

[3] San AgustIn, Sermón 72 A, 8; BAC 441, 1983, pg 268.