Menú
Capítulo
Punto 163
Corazón · Punto 163

 Si tu ojo derecho te escandalizare..., ¡arráncalo y tíralo lejos! —¡pobre corazón,
que es el que te escandaliza!

Apriétalo, estrújalo entre tus manos:
no le des consuelos.
—Y, lleno de una noble compasión, cuando los pida, dile despacio, como en confidencia:

«Corazón,
¡corazón en la Cruz!, ¡corazón en la Cruz!»
 

Comentario

Boticelli, La Trinidad

Octavilla probablemente escrita en la Legación de Honduras, en Madrid. Vid el punto 555, escrito en Burgos, cuya redacción original –una carta San Josemaría al Dr. Jiménez Vargas– parece presuponer las expresiones de este punto, que serían conocidas por el destinatario desde la Legación de Honduras, donde estuvo con San Josemaría.

La doctrina de San Josemaría es que la unión del corazón del hombre al Corazón de Cristo en la Cruz, realiza humana y cristianamente a toda persona, al purificarle su propio corazón y multiplicar su capacidad de «querer».

Leer el punto 58 y su comentario sobre el tema «llagado Corazón».

La última parte de este punto reaparece en el Via Crucis, cerrando la 5ª estación:

«A veces la Cruz aparece sin buscarla: es Cristo que pregunta por nosotros.

Y si acaso ante esa Cruz inesperada, y tal vez por eso más oscura, el corazón mostrara repugnancia... no le des consuelos.

Y, lleno de una noble compasión, cuando los pida, dile despacio, como en confidencia: corazón, ¡corazón en la Cruz!, ¡corazón en la Cruz!» [1].

Para la expresión «¡corazón en la Cruz!» vid el comentario al punto 555.



[1] Via Crucis, 5ª Estación.