Octavilla de la serie escrita por San Josemaría en 1937, , sin documentos de contexto inmediato. Estimo que debe situarse su redacción en el tiempo que estuvo refugiado en la Legación de Honduras, en Madrid,como casi todo el conjunto de la serie.

En este sentido tiene interés un texto de Jiménez Vargas, donde a propósito de este punto escribe:

«No puedo recordar exactamente cuándo escribió esto, pero me parece que lo leí en uno de esos cuadernos que tenía, de los que alguna vez nos dejaba leer alguna cosa concreta para nuestra formación» [1].

Este texto no se encuentra en ninguno de los Cuadernos. El Dr. Jiménez Vargas sitúa la peripecia concreta que da lugar al texto en la Residencia de Ferraz, durante el curso 1935-36.

Cabe pensar que quizá San Josemaría lo leyera en alguna de las 22 primeras hojas perdidas del Cuaderno que escribía durante su estancia en la Legación de Honduras.

San Josemaría